En exclusiva, para Biblioteca de Alejandría, mi amigo y mentor en Literatura, me ha autorizado para transcribir su cuento aquí, para el especial de Halloween, a ver que les parece...
Esta historia pertenece a la colección "Cuentos de Ocio".
Nota: Muchas gracias a Mauricio Vallejo Márquez por la autorización.
El castigo
Nunca había conocido la morgue, ni nada parecido. En cuestiones de la muerte se podía decir que era virgen. Pero la noche del sábado tuvo que abrazarse fuerte a si mismo cuando descubrió que estaba rodeado de muertos. Bajando la mirada se dio cuenta que sólo sus ojos le respondían y que el resto estaba inerte. Confundido se percató de que no estaba muerto, pero no entendía por qué estaba en ese salón. En ese momento entró el padre Tobías y le dijo: "Creo que ya aprendiste tu lección Alberto, te vamos a inyectar nuevamente para que vuelvas a tus oficios y no pienses más en ese pecado".
Nota: Imagen representativa...
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¡Un saludo!
1 comentario:
¡hola!
¡es un cuento muy intrigante! :D
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